01/10/2024
El año 2014 marcó un momento fascinante en la evolución del maquillaje. Fue un periodo donde algunas tendencias de años anteriores se consolidaron, mientras otras nuevas emergían con fuerza, definiendo un estilo que, en retrospectiva, se siente distintivo de esa época. Dejando atrás la piel excesivamente mate de principios de la década, el enfoque comenzó a virar hacia una tez más fresca y luminosa, aunque sin abandonar por completo técnicas que añadían estructura al rostro. Los ojos ganaban protagonismo con delineados precisos y cejas que dejaban atrás la delgadez para abrazar una plenitud definida. Los labios, por su parte, ofrecían un abanico de posibilidades, desde nudes discretos hasta colores vibrantes con acabados diversos.
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Explorar las tendencias de maquillaje de 2014 es sumergirse en un momento de experimentación y definición. Fue un año en el que la democratización de las técnicas de maquillaje, impulsada por las redes sociales y los tutoriales en línea, permitió que más personas exploraran looks más complejos y pulidos. La influencia de las celebridades y los maquilladores profesionales se sentía más accesible que nunca.

La Piel: Entre el Glow y la Definición
La base del maquillaje en 2014 buscaba un equilibrio. Si bien la piel mate no desapareció del todo, la preferencia se inclinaba cada vez más hacia acabados más naturales y luminosos. El concepto de piel luminosa o 'dewy' comenzó a ganar terreno, buscando un aspecto saludable y fresco. Esto se lograba utilizando bases con acabados satinados o aplicando iluminadores líquidos o en crema estratégicamente antes o después de la base.
La preparación de la piel cobró una importancia vital. Los primers se convirtieron en un paso indispensable para lograr una superficie lisa y uniforme, optimizando la duración del maquillaje y mejorando la apariencia de la piel. Se buscaba minimizar los poros y controlar el brillo en las zonas clave, manteniendo la luminosidad donde se deseaba.
Pero la luminosidad convivía con una técnica que vivía su apogeo: el contouring. Aunque ya existía desde hace tiempo, el contouring se popularizó enormemente en 2014, impulsado por la era de Instagram. La idea era esculpir el rostro mediante la aplicación estratégica de tonos más oscuros (para crear sombras y hundimiento) y tonos más claros (para resaltar y dar volumen). Se definían pómulos, se afinaba la nariz, se marcaba la línea de la mandíbula y se destacaba la frente. Esta técnica, a menudo realizada con productos en crema antes de sellar con polvo, buscaba crear una estructura facial más definida y tridimensional.
El highlighting (iluminación) era el complemento perfecto del contouring. Se aplicaban productos iluminadores en los puntos altos del rostro: la parte superior de los pómulos, el puente de la nariz, el arco de Cupido, bajo el arco de la ceja y, a veces, en el centro de la frente y la barbilla. Los iluminadores en polvo, crema o líquidos eran populares, buscando un brillo que capturara la luz y complementara la definición creada por el contouring. El objetivo era una piel que se viera contorneada pero también radiante.
El corrector, más allá de cubrir imperfecciones, se usaba también para iluminar la zona bajo los ojos y crear una base clara para el contouring y el highlighting. La técnica de 'baking' (aplicar una capa generosa de polvo translúcido sobre el corrector y dejarlo 'cocinar' unos minutos antes de retirarlo) comenzó a ganar adeptos, buscando un acabado impecable y duradero en la zona de la ojera.
Los Ojos: Delineados, Cejas y Color
Los ojos en 2014 eran un lienzo para la expresión. El delineado felino o 'cat eye' era un clásico que se mantenía fuerte, adaptándose a diferentes grosores y longitudes de rabillo según la audacia deseada. Desde líneas finas y discretas hasta trazos gruesos y dramáticos, el eyeliner líquido o en gel era la herramienta preferida para lograr esa precisión.
Las sombras de ojos ofrecían versatilidad. Los tonos neutros como marrones, beiges, dorados y bronces eran omnipresentes para looks de día y de noche, permitiendo crear transiciones suaves y looks ahumados clásicos. Sin embargo, también había espacio para el color. Tonos metálicos, especialmente oros y cobres, eran muy populares para añadir un toque de glamour. Los tonos borgoña y ciruela también emergían como opciones sofisticadas para looks de noche o de otoño.
Las pestañas buscaban volumen y longitud. La máscara de pestañas era un producto esencial, a menudo aplicada en varias capas para un efecto dramático. Las pestañas postizas, especialmente las individuales o en tiras discretas, se usaban para añadir un extra de intensidad en ocasiones especiales.
Pero si hubo una tendencia que definió el 2014 en cuanto a ojos, fueron las cejas. Se dejó atrás la moda de las cejas finas para dar paso a las cejas definidas y pobladas. No se trataba de cejas salvajes, sino de cejas cuidadosamente trabajadas: rellenas con lápiz, sombra o gel para corregir huecos y darles forma, a menudo peinadas hacia arriba en la parte inicial para un efecto más natural y fijadas con gel transparente o con color. La forma buscaba un arco marcado pero natural, enmarcando el ojo y estructurando la cara.
Los Labios: Del Mate al Brillo
El 2014 fue un año de transición para los labios. Los acabados mate empezaban a ganar mucha popularidad, presagiando el boom de los labiales líquidos mate de años posteriores. Sin embargo, los acabados satinados y cremosos seguían siendo muy relevantes, ofreciendo comodidad y un look más tradicional.
En cuanto a colores, la diversidad era clave. Los tonos nude seguían siendo un básico indispensable, adaptándose a cada tono de piel para crear looks discretos o para equilibrar ojos ahumados intensos. Los nudes rosados, melocotón y marrones claros eran especialmente populares.

Pero también había espacio para el color audaz. Los rojos vibrantes, fucsias intensos, corales llamativos y los tonos ciruela y borgoña estaban muy presentes, especialmente para looks de noche o para dar un toque de color a un maquillaje de ojos más sencillo. La elección del color del labial a menudo dependía del equilibrio con el maquillaje de ojos y del evento.
El perfilado de labios era una técnica común, utilizada para definir el contorno y evitar que el color se corriera. A menudo, se utilizaba un lápiz del mismo tono o ligeramente más oscuro que el labial para dar una apariencia de labios más voluminosos.
Las Mejillas: Color y Contorno
Las mejillas en 2014 servían para añadir color y complementar la estructura creada por el contouring y el highlighting. El rubor se aplicaba principalmente en las manzanas de las mejillas, difuminándolo hacia las sienes.
Los tonos variaban según la estación y el look. Rosados, melocotones y corales eran populares para un aspecto fresco y juvenil. Tonos más cálidos como el terracota o el bronce se usaban a veces para dar un toque de calidez o para complementar el contouring.
Aunque el contouring ya definía la estructura, el rubor añadía vida y un toque saludable al rostro. Se buscaba que el color se viera natural, como un rubor interno, aunque la intensidad podía variar.
Tabla Comparativa: Acabados de Piel Populares en 2014
| Acabado | Características | Productos Clave | Efecto Visual |
|---|---|---|---|
| Luminoso (Dewy) | Piel hidratada, con brillo sutil. | Bases satinadas, iluminadores líquidos/crema, primers hidratantes. | Aspecto saludable, fresco, radiante. |
| Semi-Mate | Equilibrio entre mate y luminoso. Control de brillos pero sin sequedad. | Bases semi-mate, polvos translúcidos en zona T. | Aspecto pulido, duradero, natural. |
| Contorneado/Esculpido | Rostro con sombras y luces marcadas. | Correctores/bases oscuras y claras, polvos de contorno e iluminadores. | Aspecto definido, tridimensional, ideal para fotografía. |
Preguntas Frecuentes sobre el Maquillaje de 2014
¿Era el contouring tan popular como lo recordamos?
Sí, el contouring vivió un momento de gran auge en 2014, pasando de ser una técnica de maquilladores profesionales a ser adoptada por el público general. Era común ver looks muy definidos gracias a esta técnica.
¿Qué colores de labial eran imprescindibles?
Los nudes en diversas tonalidades (rosado, melocotón, marrón) eran básicos, pero los rojos clásicos, fucsias y tonos oscuros como el borgoña también eran muy populares para añadir un toque de audacia.
¿Cómo se llevaban las cejas en 2014?
La tendencia clara era hacia las cejas más pobladas y definidas. Se rellenaban y daban forma cuidadosamente, buscando un arco marcado pero natural. Las cejas finas quedaron en el pasado.
¿Se usaba mucho brillo en los ojos o cara?
Sí, el brillo se usaba estratégicamente. Los iluminadores eran clave para la piel luminosa. En los ojos, las sombras metálicas (dorados, bronces) eran populares, pero el glitter excesivo no era una tendencia dominante para looks diarios.
¿Se prefería la piel mate o luminosa?
Hubo una clara inclinación hacia la piel luminosa o semi-mate, dejando atrás la piel completamente mate de años anteriores. Se buscaba un aspecto más fresco y saludable.
En resumen, el maquillaje de 2014 se caracterizó por la búsqueda de una piel definida pero luminosa, cejas audaces y bien cuidadas, y ojos que combinaban delineados clásicos con sombras versátiles. Los labios ofrecían un abanico de opciones, desde nudes sutiles hasta colores intensos. Fue un año donde la técnica se volvió más accesible, permitiendo looks más elaborados y personalizados.
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