10/10/2024
Lograr un acabado de maquillaje profesional no es solo cuestión de tener los productos adecuados o dominar las técnicas de aplicación, sino también de seguir una secuencia lógica. El orden en el que aplicas tus cosméticos puede marcar una diferencia abismal en cómo lucen, cuánto duran y cuán bien se integran en tu piel. Muchas personas se preguntan, ¿cuál es el orden correcto? Y específicamente, si ya he puesto el primer producto, ¿qué viene después? Esa es una excelente pregunta, y su respuesta, aunque parece sencilla, tiene sus matices.
La secuencia de maquillaje que sigues puede variar ligeramente según tus preferencias personales, el tipo de productos que uses y el look que quieras lograr. Sin embargo, existe un orden generalmente aceptado que optimiza la aplicación y el resultado. Vamos a desglosar este proceso, paso a paso, para entender por qué cada producto tiene su momento y lugar, y así, responder a la curiosidad sobre qué viene en ese crucial segundo puesto.
¿Por Qué el Orden del Maquillaje es Crucial?
Imagina intentar pintar una pared sin antes limpiarla o aplicar la imprimación; el resultado sería desigual y poco duradero. Lo mismo ocurre con el maquillaje. Aplicar los productos en el orden correcto permite que cada uno cumpla su función sin interferir con el siguiente. Por ejemplo, aplicar una base líquida después de un polvo sellador simplemente no funcionaría bien, ya que el polvo crea una barrera que impide que la base se adhiera correctamente.
El orden adecuado asegura que:
- Los productos se adhieran mejor a la piel.
- La duración del maquillaje sea prolongada.
- Los colores se vean más intensos y fieles.
- La mezcla y difuminación sean más sencillas.
- Se eviten problemas como el apelmazamiento o la formación de parches.
Entender la lógica detrás de la secuencia te da el poder de adaptar la rutina a tus necesidades específicas, sabiendo qué puedes modificar y por qué.
El Verdadero Punto de Partida: La Preparación de la Piel
Antes de siquiera pensar en la base o el corrector, hay un paso fundamental que muchas veces se subestima: la preparación de la piel. Una piel limpia, hidratada y preparada es el lienzo perfecto para cualquier obra de arte del maquillaje. Este proceso generalmente incluye:
- Limpieza: Eliminar cualquier residuo de suciedad o maquillaje anterior.
- Tónico: Equilibrar el pH de la piel y prepararla para la hidratación.
- Sérum: Tratar preocupaciones específicas de la piel (hidratación, antioxidantes, etc.).
- Hidratante (Lotion/Crema): Aportar la humedad necesaria para que la piel esté flexible y no absorba el maquillaje de forma irregular. Este es el producto que mencionas primero en tu lista.
- Protector Solar (SPF): Un paso vital para proteger la piel del daño solar, incluso si tu base ya contiene SPF.
- Prebase (Primer): Crear una superficie lisa, minimizar poros, controlar el brillo o añadir luminosidad, y ayudar a que el maquillaje dure más. El primer actúa como un puente entre el cuidado de la piel y el maquillaje.
Si consideras la preparación de la piel como parte de la rutina completa, entonces después de la hidratante (tu 'lotion' inicial), el segundo paso sería el protector solar o la prebase, dependiendo de tu rutina específica.
La Base del Look: Fundación y Corrector
Una vez que tu piel está perfectamente preparada, es hora de empezar con el maquillaje propiamente dicho. Los productos de base son los encargados de unificar el tono de la piel y cubrir imperfecciones.
Fundación (Base de Maquillaje)
La mayoría de los maquilladores profesionales y las rutinas estándar sugieren aplicar primero la fundación (o base de maquillaje). La fundación se aplica en todo el rostro (o en las áreas que necesiten cobertura) para crear un tono uniforme. Al aplicarla primero, puedes ver qué áreas aún necesitan cobertura adicional (como ojeras o granitos) *después* de haber unificado el tono general.
Corrector (Concealer)
Aquí es donde a menudo surge la confusión, y donde entra en juego tu pregunta sobre qué viene segundo. En la rutina estándar, el corrector se aplica *después* de la fundación. ¿Por qué? Porque la fundación ya habrá cubierto muchas de las imperfecciones menores. Al aplicar el corrector después, solo necesitas usar una pequeña cantidad en las áreas específicas que aún necesiten camuflaje (ojeras, manchas, rojeces persistentes). Esto evita el uso excesivo de producto, que puede verse pesado o cuartearse.
Entonces, si consideramos la aplicación de maquillaje *después* de la preparación de la piel, y seguimos el orden estándar de base, el primer paso sería la fundación, y el segundo paso sería el corrector.
Tu lista propone: lotion (hidratante) -> concealer -> foundation. En tu secuencia particular, después de la hidratante, sí, el corrector sería el segundo paso. Sin embargo, la mayoría de los expertos recomiendan invertir el orden del corrector y la fundación (fundación primero, luego corrector) para lograr un acabado más natural y eficiente.
Sellando y Dando Color: Polvos, Rubor e Iluminador
Una vez aplicada la base y el corrector, los siguientes pasos suelen ser para sellar la base y añadir dimensión al rostro.
Polvo Sellador/Compacto
El polvo (ya sea suelto o compacto) se aplica generalmente después de la base líquida o en crema para sellarla, matificar la piel (especialmente en la zona T) y aumentar la duración del maquillaje. Algunas personas con piel seca pueden omitir este paso o usar solo una pequeña cantidad en áreas específicas.
Bronceador, Rubor e Iluminador
Los productos para dar color y dimensión al rostro (bronceador para contornear o dar calidez, rubor para color en las mejillas e iluminador para resaltar puntos altos) se aplican generalmente después del polvo sellador. Aplicarlos sobre polvo permite que se difuminen de manera más suave y uniforme. Si aplicaras productos en polvo directamente sobre una base líquida sin sellar, podrían quedar parches o líneas difíciles de difuminar.
El Enfoque en los Ojos y Labios
Con el lienzo del rostro listo, es momento de concentrarse en los detalles: ojos y labios.
Ojos: Sombras, Delineador y Máscara
Muchas personas prefieren hacer el maquillaje de ojos antes que el de la base, especialmente si van a usar sombras oscuras o con mucho pigmento que puedan caer en la mejilla (fallout). Si haces los ojos primero, puedes limpiar fácilmente cualquier residuo antes de aplicar la base. Si haces los ojos después de la base, es recomendable aplicar una capa generosa de polvo suelto bajo los ojos para atrapar cualquier sombra que caiga y luego barrerlo.
- Prebase de Ojos: Ayuda a que las sombras se adhieran mejor y los colores se vean más vibrantes, además de prevenir que se acumulen en el pliegue del párpado.
- Sombras de Ojos: Se aplican en el párpado y se difuminan.
- Delineador (Eyeliner): Se aplica a lo largo de la línea de las pestañas.
- Máscara de Pestañas (Mascara): El toque final para abrir la mirada y definir las pestañas.
Labios: Delineador, Labial y Brillo
Los labios suelen ser uno de los últimos pasos.
- Exfoliación e Hidratación Labial: Preparar los labios para que el color se vea uniforme.
- Delineador de Labios: Definir el contorno y evitar que el labial se corra.
- Labial: Rellenar los labios con color.
- Brillo de Labios (Lip Gloss): Añadir luminosidad y volumen (opcional).
El Toque Final: Sellado del Maquillaje
Para asegurar que todo permanezca en su lugar durante horas, se aplica un spray fijador al final de la rutina. Esto ayuda a que todos los productos en polvo y en crema se "fusionen" en la piel para un acabado más natural y duradero.
Tu Lista vs. El Orden Recomendado
Analicemos la secuencia que mencionaste:
lotion -> concealer -> foundation -> powder -> blush -> sometimes highlighter -> eyeliner -> mascara -> lip gloss
Comparándola con el orden estándar (considerando la preparación y luego el maquillaje):
| Tu Lista | Orden Estándar Recomendado | Comentarios |
|---|---|---|
| 1. Lotion (Hidratante) | 1. Hidratante | Coincide. Es parte esencial de la preparación. |
| 2. Concealer (Corrector) | 2. Prebase (o SPF) | Diferencia clave. El orden estándar inicia el maquillaje con la base. |
| 3. Foundation (Base) | 3. Fundación | Diferencia en la secuencia de base/corrector. |
| 4. Powder (Polvo) | 4. Corrector | El corrector va antes del polvo en el estándar. |
| 5. Blush (Rubor) | 5. Polvo | El polvo sella la base/corrector. |
| 6. Sometimes Highlighter (Iluminador) | 6. Bronceador/Rubor/Iluminador | El orden dentro de los productos de mejillas puede variar, pero van después del polvo. |
| 7. Eyeliner (Delineador) | 7. Ojos (Sombras, Delineador, Máscara) | Los ojos van después de la base/polvo, aunque algunos prefieren hacerlos antes. |
| 8. Mascara (Máscara) | 8. Labios | Los labios suelen ir antes que el sellado final. |
| 9. Lip Gloss (Brillo de Labios) | 9. Spray Fijador | El brillo es el último producto en los labios. El spray fijador es el último paso general. |
Como puedes ver, tu lista sigue una lógica similar en la progresión general (preparación -> base -> polvos/mejillas -> ojos -> labios), pero el orden específico dentro de la fase de base (corrector antes de fundación) y la omisión de la prebase o el spray fijador son las principales diferencias con una rutina más convencional.
Respondiendo directamente a tu pregunta: si tu primer paso es la 'lotion' (hidratante), entonces en tu rutina, el segundo paso es el corrector. Sin embargo, si te refieres al segundo paso en la aplicación de maquillaje *después* de la preparación, y siguiendo el orden estándar, el segundo paso sería el corrector aplicado *después* de la fundación.
Preguntas Frecuentes sobre el Orden del Maquillaje
¿Siempre va el corrector después de la base?
En la mayoría de los casos, sí. Aplicar la fundación primero unifica el tono y cubre la mayoría de las imperfecciones. Luego, el corrector se usa de forma más específica en las áreas que necesitan cobertura adicional. Esto evita que uses demasiado corrector, lo que puede verse pesado. Sin embargo, algunas técnicas, como aplicar corrector de color antes de la base para neutralizar rojeces o manchas oscuras, o hacer 'spot concealing' con un corrector de alta cobertura antes de una base ligera, existen, pero el orden fundación-corrector es el más común y recomendado para la mayoría.
¿Puedo poner el iluminador antes del rubor?
Sí, el orden entre bronceador, rubor e iluminador es bastante flexible una vez que se aplican sobre la base sellada con polvo. Algunas personas aplican primero el bronceador para contornear, luego el rubor en las mejillas y finalmente el iluminador en los puntos altos. Otras prefieren aplicar el rubor primero para saber dónde quieren el color principal y luego añadir el iluminador. No hay una regla estricta aquí; experimenta para ver qué orden te da el mejor resultado de difuminado y efecto.
¿Cuándo va el primer?
La prebase (primer) va después de toda tu rutina de cuidado de la piel (limpieza, tónico, sérum, hidratante, SPF) y justo antes de la fundación. Actúa como la capa final de preparación de la piel y la primera capa de maquillaje.
¿Es necesario usar polvo para sellar?
Depende de tu tipo de piel y del acabado que desees. Si tienes piel grasa o mixta, el polvo es muy recomendable para controlar el brillo y fijar la base. Si tienes piel seca, puedes usar un polvo hidratante, solo sellar la zona T, o incluso omitirlo si usas productos en crema y buscas un acabado muy luminoso y natural. Si no usas polvo, ten en cuenta que los productos en crema o líquidos que apliques encima (como rubor líquido o en crema) deben aplicarse con cuidado para no mover la base.
Conclusión
El arte del maquillaje es un viaje personal, pero entender los principios básicos del orden de aplicación puede elevar tus resultados. Si bien tu rutina actual comienza con la hidratante seguida del corrector, la secuencia estándar más recomendada es comenzar con la preparación de la piel (incluida la hidratante), luego aplicar la fundación y *después* el corrector, para continuar con polvos, productos de color para el rostro, ojos y labios, y finalizar con un spray fijador. Experimenta con el orden para descubrir qué funciona mejor para ti y tu piel, pero recuerda que cada paso tiene una razón de ser en la búsqueda de un acabado impecable y duradero. Dominar la secuencia es tan importante como dominar la técnica.
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